Pequeñas y grandes historias

 “La mente es como un paracaídas, solo funciona si la tienes abierta”  

 

         Hace unos días, tuvimos la suerte de contar con la presencia de dos padres de niños con necesidades educativas especiales. Ésto nos sirvió para conocer de primera mano cómo se vive en estas familias una situación así y la importancia que tiene tener un diagnóstico específico. A pesar de que pensamos que es muy difícil ver y aceptar que el niño tenga un problema, es mucho más difícil para las familias no saber exactamente qué es lo que le pasa a su hijo.

      Una vez que existe un diagnóstico, creemos que es muy importante tener la mente abierta, contar con imaginación y creatividad para buscar una gran cantidad de recursos y de esta manera, poder desarrollar la vida los niños de una forma lo más normalizada posible, ya que en muchas ocasiones si no se llega a un 33% de discapacidad no se dispone de ningún tipo de ayuda por parte del Estado.

        Estas situaciones suponen un cambio brusco en la vida diaria, por lo que pensamos que es importante no derrumbarse y tener una actitud positiva para normalizar y reestructurar la vida, aunque a cada uno le lleve un periodo de tiempo diferente en cada ocasión.

Por otro lado, creemos que estos padres, dentro de lo que cabe, han tenido “suerte” en cuanto a los recursos se refiere, y por lo que ellos nos han contado, ambas familias tienen un nivel socioeconómico elevado y han podido permitirse gran cantidad de apoyos y recursos, cosa que otras familias con una situación económica diferente no podrían habérselo permitido.

        Sin embargo, hay que tener en cuenta las necesidades que tiene el niño, porque a veces pensamos que cuanto más apoyo se tiene, mejor va a ser para él y para su desarrollo, y por ejemplo como ocurre en el caso del niño con TEA, estaba sobrecargado de actividades y no era beneficioso para él. Por último, queremos destacar que es fundamental la comunicación entre ambos miembros de la pareja para poder coordinar todas las actividades de la vida diaria y  no desatender al resto de hijos.

       También consideramos importante la coordinación entre ambos centros ya que creemos conveniente que se trabaje sobre los mismos contenidos para que se produzca un progreso adecuado ya que si no se hace de esta manera, los progresos conseguidos en un centro se pueden ver perjudicados por parte del otro centro; así como es fundamental la coordinación con las familias de tal forma que se pueda trabajar de forma interdisciplinar los contenidos trabajados para un desarrollo positivo del niño.

          Como conclusión, queremos destacar que para nosotras ha sido una experiencia muy enriquecedora el poder haber asistido a este coloquio y conocer en persona a gente real que ha vivido estos casos y poder empatizar de una manera más cercana con ellos.